lunes, 14 de febrero de 2011

POTOSI, BOLIVIA

Potosí es una de las ciudades más antiguas, famosas y de más historia de América. Llego a ser el mayor centro de producción de plata del continente y se convirtió, en pleno XVII, en la ciudad más grande de América.

¡Vale un Potosí! fue una frase común en la época colonial para expresar el altísimo valor de un objeto.

La Casa de la Moneda. Esta  imponente casona es monumento nacional y tiene más de cien piezas de pintura, esculturas, muebles y objetos de incalculable valor histórico. Entre ellas, monedas elaboradas por la corona españolay otras naciones latinoamericanas, así como las propias máquinas de acuñación.

Toda la plata acuñada en este edificio, que ocupa una manzana entera, podría haber servido para tender un puente entre Potosí y España.

La catedral es uno de los edificios más famosos de la ciudad, data del año 1700 y además, hay 37 iglesias de la época colonial.

Panorámica de la ciudad
Catedral
Casa de la Moneda

En estos momentos me encuentro en el estado de Beni, en el Amazonas de Bolivia. Vamos a visitar la jungla, la pampa y el Parque Nacional Madini, uno de los Parques Nacionales con más biodiversidad del mundo y donde se pueden encontrar muchas aves y animales.

Desde la Paz, tomamos un avión Fhilip (uno de los suizos) y yo, ya que no había plazas para todos. El resto, otros dos suizos y una suiza vienen en bus desde la Paz. El viaje les llevará unas 17 horas de viaje, toda una peregrinación de viaje... haber como llegan porque no para de llover. Las carreteras aquí desde La Paz en su mayoría son de ripio (pista de tierra), toda una aventura.

Es un pueblo tranquilo a orillas del río Beni, un afluente del Amazonas. El río viene muy cargado de agua y es espectacular verlo, el agua es de color rojo por todos los sedimentos y minerales que arrastra. La mayoría de estos minerales son hierro.

El pequeño avión que nos ha transportado tenía una capacidad de 19 personas. Los asientos estaban separados por un pasillo muy estrecho y se podía ver a los pilotos y toda la cabina. En apenas una hora, estábamos en plena jungla desde la Paz.

Quiero saludar a mis compañeros de trabajo de Egoin y pedirles si pueden mandarme mensajes por este blog. Me gustaría mucho saber de ellos porque también me acuerdo de vosotros, aunque este viviendo una experiencia única e inolvidable. Así me contáis que os parece el blog. Un saludo a todos.

Agur

domingo, 13 de febrero de 2011

POTOSI, CERRO RICO. BOLIVIA.

Cartucho de dinamita con el detonador.
Visitar Potosí y observar el esplendor de antaño en sus edificios coloniales y sus minas de plata es un espectáculo que impresiona.

Es la ciudad más alta del mundo (4070 m) y  fue declarada Patrimonio Mundial por la Unesco en 1987. Potosí se eleva acompañada de una montaña histórica, el Cerro Rico (4800m.) .

La historia de la Villa Imperial de Potosí data del año 1545. El indio Diego Huallpa pasó la noche en el cerro y para protegerse del frío encendió una hoguera, fue así como descubrió que por su superficie brotaban hilos de plata. Decidido, llevó la Plata a la mina de Porco que por aquel entonces estaba siendo explotada por los españoles entre Potosí y Uyuni y así es como los españoles comenzaron a explotar dicho sitio.

La ciudad se fundó en 1545 tras los descubrimientos de los yacimientos de plata y en 1610 llegó a alcanzar las 160.000 personas. Por aquel entonces ciudades europeas como Paris contaban con 60.000 habitantes y Madrid apenas llegaba a 40.000. Sus filones de plata llegaron a ser los más lucrativos del mundo y la gente vestía de seda con encajes de oro y plata..

Millones de indígenas y de esclavos traídos de África fueron reclutados para trabajar en las minas en unas condiciones atroces, esto provocó la muerte de miles de personas.

Durante la época colonial fueron extraídos dos mil millones de onzas de plata y hoy en día salen cerca de 4000 toneladas de concentrados de Plomo, Plata, Zinc, Antimonio,Wolframio y Estaño. Se estima que de el total extraído, el 25% es riqueza mineral mientras que el resto es basura.

Vagonetas hacia el interior de la mina
Las Agencias turísticas de Potosí se dedican a hacer tours dentro de las minas para dar a conocer como trabajan los mineros y poder ver las duras condiciones en las que todavía, a día de hoy, realizan los trabajos.
Con una de estas agencias decidí entrar en las minas acompañado por mis amigos suizos. Éramos 18 personas y fuimos divididos en dos grupos. Teníamos un guia para cada grupo, uno de ellos hablaba ingles.

Los guias son antiguos mineros que trabajan en la agencia y son profesionales con muchos años de experiencia, muchos trabajando en las minas desde niños.

Cartucho de Dinamita
Comenzamos por el mercado minero que es donde los mineros compran todo el material necesario para realizar su trabajo. El mercado consiste de una serie de pequeñas tiendas a ambos lados de la calle y allí nos explicaron con que materiales trabajan. Para las detonaciones usan dinamita y sulfato de amonio, un fertilizante que lo para aumentar la fuerza en las explosiones. Antes de entrar, compramos regalos para los mineros que estaban trabajando dentro de la mina: cartuchos de dinamita, detonadores, Sulfato de Amonio, botellas de agua y bolsas de hojas de coca.


Dinamita bolsa de Sulfato de Amonio y detonadores.
Mina Candelaria
Desde el mercado minero nos llevaron hacía a la entrada de la mina Candelaria a 4270 m, en el Cerro Rico. Allí experimenté una de las experiencias más duras y traumáticas de mi vida. Fuí testigo de las condiciones precarias en las que trabaja esta gente: el alcohol, la desnutrición, las enfermedades, los males respiratorios y la falta de higiene golpean a diario a los indígenas.

A la entrada a la mina al lado de la puerta hay manchas de color rojo, es sangre de llama. Los mineros hacen rituales para que la Pachamama (diosa de la tierra en idioma quechua) les proteja en su trabajo diario.


Bajando hacia niveles inferiores
Bajando hacia niveles inferiores
Entramos unos 400 m en dirección horizontal para luego ir bajando niveles. Había sitios en los que literalmente bajabas arrastrandote y el espacio era muy reducido. El guía siempre iba por delante nuestro.

Llegamos a una sala mas grande y el guía nos explicó como cada primer viernes de cada mes los mineros hacen ofrendas a El Tío, una representación de su propio diablo. Los mineros le piden que les proteja y que les de suerte para encontrar buenos minerales. Primero beben un trago del Whisky de los Andes, un alcohol de 96 grados, y derraman unas gotas en el suelo. Pude beber un pequeño trago que nos ofreció un minero y la boca te arde tanto que cuesta pasarlo por la garganta. Ellos lo beben diariamente.


Además del alcohol, los mineros mastican hojas de coca para poder aguantar las ocho horas de intenso trabajo diario debido a las duras condiciones de esfuerzo. Las condiciones de seguridad son mínimas.

En la mina, hay galerías de piedra del año 1600, cuando los españoles explotaron este lugar. En una de esas estrechas galerías paramos para hacer una detonación con dinamita una parte del techo. Allí pudimos ver todo el proceso de elaboración de una detonación. El minero al cargo tenía 16 años y trabajaba en la mina desde los 13 años.
Galería de la época colonial
El agujero horizontal y de un metro de largo estaba alto para la estatura del minero y el guia decidió que el más alto del grupo, uno de los suizos, realizara la operación de meter la dinamita y los demás compuestos.  Todo ello fue supervisado y realizado con seguridad.

Los demás también ayudamos en la elaboración. El primer paso fue introducir en unos pequeños cartuchos de papel una pequeña parte de dinamita. En segundo lugar pusimos el nitrato de amonio, que es lo que hace aumentar la explosión y la onda expansiva. En última instancia añadimos lo que llaman el taco de tierra fina, tierra de la propia mina mezclada con un poco de agua que es introducida en los cartuchos. Esto es lo que hace que la carga detone dentro del agujero y no deje que la onda expansiva salga.

Midiendo el detonador
Introduciendo las cargas
Encendiendo la mecha
Después de todas estas maniobras, llegó la hora de la detonación. Nos situamos al final de la galería y esperamos impacientes durante los cuatro minutos que teníamos antes de la detonación. Pero algo sucedió, al parecer la mecha se corto en el interior por una mala manipulación. Al parecer no se introdujeron bien todos los componentes con la vara de hierro y no hubo detonación.

La realización de este tipo de trabajo tiene que ser de un profesional e incluso a ellos a veces les suele pasar este tipo de cosas.

Precipitadamente, salimos por otro conducto por si la carga detonaba. Subimos hacía las galerías de arriba y nos encontramos con el resto de los compañeros que estaban con el guía en ingles. Allí, otros mineros estaban finalizando una carga y tuvimos que esperar para la detonación. Fue una explosión seca y no demasiado ruidosa. Una vez finalizado la detonación, salimos de la mina.

En total, estuvimos dos horas en el interior de la mina donde el calor en el interior aumenta por cada 30 metros cerca 1 grado, pudiendo llegar a temperaturas cercanas de hasta 50 grados.

Cinco siglos de continua explotación pasa factura al Cerro Rico. En las últimas décadas las compañias privadas han llegado hasta la cúpula del cerro debilitándola. La mina tiene enormes grietas que amenazan con el derrumbe literal del cerro. Las grietas siguen creciendo continuamente debido a las incesantes lluvias.

Potosí, la ciudad que fue un símbolo mundial de riqueza inagotable es ahora una ciudad de sinuosas, desordenadas y sucias callejuelas. Es habitual observar por las calles como los indígenas ebrios se mezclan con las lujosas camionetas de los propietarios de las minas.

Pese a todo, todavía queda en la memoria de todos la famosa frase que ha acompañado a este espectacular lugar durante siglos: ¡Vale un Potosí!

viernes, 11 de febrero de 2011

TUPIZA ,SALAR DE UYUNI. BOLIVIA


Tupiza (3000m) es un pueblo tranquilo rodeado de un impresionante paisaje de colores formado por rocas, colinas, montañas y cañones en la cordillera de Chichas.  Las formaciones rocosas formadas por la erosión del agua y el viento a través de millones de años forman un paisaje espectacular, el famoso "El Sillar" es un ejemplo de ello.

El Sillar
Avestruz
En los últimos días hemos hecho el tour de 1200km a través del altiplano Boliviano en dirección oeste desde Tupiza hasta Uyuni. Con un todo terreno mis compañeros de viaje han sido el conductor, la cocinera, dos chicas de Suecia y mis dos amigos Suizos. El viaje ha durado cuatro días y hemos atravesado aldeas y pueblos por pistas a gran altura, llegando alcanzar los 5000m en la zona de los Geiseres.

El primer día salimos temprano y fuimos ganando altura rápidamente. El paisaje era semi desértico, había cáctuses por todos lados y a partir de 3500m comenzamos a ver arbustos, como la paja brava y la llareta, resistentes a la altitud. Es el verano Boliviano y no para de llover, generalmente por las noches. Esto esta causando corrimientos de tierra y derrumbes por todo el país causando en lo que va de Enero cien muertes en accidentes de trafico. La estación de lluvias va desde Diciembre hasta Abril y la estación seca prevalece durante el resto del año.

Las pistas por donde circulamos estaban embarradas y gracias a la tracción del todo terreno logramos salir de ellas y poder circular normalmente. Con un turismo normal sería imposible andar por aquí, si te sales de la pista corres el peligro que quedarte atascado, el terreno esta muy blando por las lluvias.

La primera noche la pasamos en Relave, una aldea remota a 4200m de altura, en unas casas construidas de ladrillo de adobe compuestas de paja, barro y piedras.

A las orillas del camino había muchas piedras o lajas (como las llaman aquí) y una de ellas hizo un corte en una de las ruedas así que tuvimos que parar para poner una rueda de repuesto. Daniel, el chofer, colocó el gato debajo del eje trasero para sacar la rueda y en una de estas a Jorg, el suizo, no se le ocurre otra cosa que montarse en el Jeep desestabilizando el vehículo y cayendo así el gato y el eje sin la rueda al suelo.

Tuvimos que levantar el jeep desde la llanta con el gato y meter un montón de piedras debajo del eje. Cada vez que poníamos piedras en el eje y bajábamos el gato, las piedras se hundían y había que volver a empezar. El gato no tenía altura suficiente porque el eje trasero estaba en el suelo. La operación  para cambiar la rueda nos llevo unas dos horas. Calzar el eje con piedras con seguridad, poder levantar el jeep con el gato y meter la rueda en su sitio es una autentica odisea en estos parajes. En todo el tiempo que duro la reparación, no paso ningún otro vehículo. Si la avería hubiera sido mas serías o hubiéramos tenido un accidente, las cosas se hubieran complicado mucho. En Bolivia, los Jeep no llevan ni siquiera una simple radio.

El segundo día pasamos por Laguna Blanca y Laguna Verde a orillas del volcán Licancabur (5920m), que estaba totalmente tapado por la niebla debido al mal tiempo de ese día. También vimos los Geiseres que desprendían vapor de agua a unos 85 grados. Al anochecer llegamos a Huallajara donde pasamos la noche.

Al día siguiente, vimos el famoso árbol de piedra. Durante miles de años el agua y el viento han tallado la piedra de tal forma que la roca ha adquirido una forma similar a la de un árbol.

La Laguna Colorada de 60 km de longitud y llena de Flamencos, llamas y Vicuñas fue algo especial y espectacular. El color de sus aguas son de color rojo debido a la alta concentración de algas.

Laguna Colorada
Los Flamencos tienen el color rojo en su piel debido a las algas de color rojo que comen en su dieta diaria. Los que tienen mayores partes del cuerpo con ese color son los que tienen mayor edad debido a que han comido más algas durante mucho tiempo.

El Ultimo día llegamos a Uyuni donde pasamos la noche. Al día siguiente visitamos el salar mas grande del mundo con 12000 km, una formación que se formo hace millones de años y que dio origen al Golfo de Uyuni. En el periodo de lluvias formaba una película de agua resaltando más su belleza y reflejando el cielo en la superficie, una de las maravillas màs impresionantes del mundo.

Salar de Uyuni

El agua en el salar dificulta mucho la entrada y es muy peligroso alejarse mucho. Hace unos años un todo terreno se perdió con siete personas. El vehículo se alejó mucho de las zonas de seguridad y cayó por unos de los llamados ojos del salar. Estos "ojos" son  agujeros o "venas", el salar no tiene el mismo grosor en todos los sitios y con abundante agua el terreno cede. Esto fue lo que tragó literalmente el jeep.

Una experiencia inolvidable la que pase por estos lugares en compañía de mis amigos.

Valle del Altiplano
Desierto de Siloil
Huallajara
Geiseres Sol de Mañana (5000m)
Vicuña Laguna Colorada